Sin embargo, según reporta Infowars.com, los daños al cuerpo humano no se eliminaran con esta reducción ya que el fluororo del agua se almacena por largos periodos de tiempo en el cuerpo. (Se pueden consultar estudios sobre los daños del fluororo de sodio en casos de cáncer en los huesos, fracturas óseas, tiroidismo, inlfamación cerebal, menor IQ en niños y perdida de funciones mentales, esteriliidad o reducción de fertilidad y hasta la calcificación de la glándula pineal, el llamado tercer ojo, el lugar donde se concentra la mayor cantidad de flurouro en el cuerpo humano, lo que detona una teoría de la conspiración en torno al uso intencional de fluoruro en contra de la población).
Esta disminución, aunque insuficiente, revela el efecto que han tenido los reportes sobre los daños de fluoruro y la pelea de la Environmental Protection Agency (EPA) y otras organizaciones que basan su oposición a esta sustancia en diferentes estudios médicos, incluyendo el que vincula un aumento de hasta siete veces en el cáncer en los huesos en niños expuestos a grandes cantidades de fluororo.
El fluororo de cualquier forma es común en varios productos alimenticios en mayor concentración que el agua, en pesticidas usados para la producción de comida y en el abono.
Al mismo tiempo el agua potable incluye otros químicos tóxicos como plomo, arsénico, radio y hasta uranio. Estos cócteles químicos de agua son dosificados en diferentes ciudades de Estados Unidos y en algunas otras partes del mundo. El periodista Alex Jones teoriza que la reducción del fluoruro tal vez sea solamente una medida orientada a otorgar inmunidad a aquellos distritos que dimsinuyan la cantidad de fluoruro ante futuras acusaciones de daños a la salud.
Fuente: http://pijamasurf.com
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