En la denominada por Fernando Paulsen como falacia argumentativa, el gobierno en pleno manifiesta de manera categorica que no quieren educación gratuíta porque según ellos, no quieren que los pobres le paguen los estudios a los más ricos.Descontando que ese porcentaje de alumnos ricos no supera el 2%, que la ConfechSIEMPRE ha propuesto partir primero por los sectores más necesitados, y que si de verdad la derecha pensara en los más pobres estarían abiertos a reformas tributarias para que los emprearios paguen más impuestos. Ahora a todo esto, se suma la situación de que actualmente, YA LE PAGAMOS LA EDUCACIÓN A LOS MÁS RICOS LEER MAS...
Esto por un estudio que realizó el mismo gobierno a través de la Segpres que demostró que los deciles más pobres tienen mucho menor acceso a estos beneficios. El estudio muestra que en la actualidad sólo el 6,9% de los estudiantes del primer decil recibe becas, realidad muy diferente a lo que ocurre con los alumnos del décimo decil (sector más acomodado), que concentra el 12,9% de los beneficios.El informe, como no podía ser de otra forma ya que lo realizó el gobierno, se concentra en las becas como metodo de solución sin mayores argumentos ya que siguen siendo medidas parche que no rediseñan el modelo, algo así como darle más aspirinas a un paciente terminal. Sin ir más lejos el historiador Gabriel Salazar afirmó algo parecido:
“Hay oposición al sistema de gratuidad porque no quieren asumir los costos que lleva aumentar el presupuesto y hacer una reforma tributaria. Por eso prefieren la política de las becas, ya que tiene un costo menor, so pretexto de ayudar a los pobres, siguen manteniendo este modelo neoliberal”.
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