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Con esas palabas el ex rector de la Uach, estimuló a los asistentes, de diferentes carreras de la Universidad y con un público virtual de varias ciudades del país y del extranjero, sobre la importancia de la convocatoria y participación ciudadana y estudiantil que ha tenido el movimiento en contra de la construcción de represas en Patagonia. El Dr. Max Neef, quien ha logrado posicionarse como una de las principales voces opositoras de este proyecto, advirtiendo que desde la década de los 60 no había tal movimiento ciudadano, horizontal a su vez, de reclamo por una vida más digna. LEER MAS...

El Dr. Max Neef, destacado economista, fue galardonado con el Right Livelihood Award, en 1983, considerado como el Premio Nobel alternativo de economía. Sus obras más destacadas son “Economía Descalza” y “Desarrollo a Escala Humana”. Fue miembro del Consejo Asesor de los Gobiernos de Canadáy Suecia para el Desarrollo Sustentable, y presidencial independiente en 1993. Actualmente trabaja como Profesor Titular de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Uach, y también como director del Instituto de Economía.

El proyecto Hidroaysén, aprobado el pasado 9 de mayo, con 11 votos a favor y una abstención, pretende la construcción de cinco centrales hidroeléctricas, dos en el río Baker y tres en el río Pascua, ubicadas en la región de Aysén. El impacto que ha tenido en la ciudadanía, tras la aprobación de éste, ha movilizado a miles de opositores, quienes, de forma espontánea han manifestado su descontento a través de marchas y otras manifestaciones.

Este complejo hidroeléctrico produciría una potencia de 2.750 Megawatts, energía que igualmente pretende ser comercializada a Argentina, según lo expresado en el último tiempo por el Gobierno. El costo de la inversión se estima en unos 3.200 millones de dólares, y estaría operando desde el año 2020. Además, se contempla la construcción de una línea de transmisión -aún no aprobada- que transportará la energía desde la región de Aysén hasta Santiago, incluyendo un tramo submarino entre las comunas de Chaitén yPuerto Montt, en total: 1.300 kilometros, que “atraviesa nueve regiones, fragmenta seis parques nacionales, 11 reservas nacionales, 26 sitios pioritarios de conservación, 16 humedales y 32 áreas protegidas privadas, o sea, esto es algo nunca visto en ninguna parte del mundo. Además, se trata de torres de 70 metros, que equivalen a edificios de 25 pisos. Además, hablamos de un área que debe estar despejada, alrededor de 32.000 hectáreas, para la instalación de 5750 torres. Piensen ustedes cómo trasladan esa cantidad de torres, ¿cuánta naturaleza más hay que destruir para llevar las torres a sus puntos de instalación?” -dijo el Dr.Max Neef. En tanto, las principales empresas responsables, Endesa yColbún S.A., establecerían un duopolio de energía eléctrica de Chile, al concentrar el 80% de la generación eléctrica del país. Sobre esta división del proyecto entre construcción de las represas y la línea de transmisión, el Dr. Max Neef agregó: “tienen la historia de un proyecto que no es sólo monstruoso, sino que está repleto de falsedades y propiedad de un duopolio”.

“Tal vez es la primera lección que nuestra sociedad civil debiera aprender, en cuanto a la fuerza potencial que tiene para modificar situaciones, o para orientar el desarrollo del país en una u otra vía”, señaló refiriéndose a la fortaleza del movimiento ciudadano, que ha visibilizado un 74% de desaprobación del proyecto Hidroaysén; además dio a conocer la existencia y viabilidad de proyectos que generen de otro tipo de energías de menor impacto ambiental, y criticó la falta de información sobre los derechos ciudadanos y derechos energéticos de los chilenos, además de la garantía que tienen los privados por sobre las personas, y las jerarquías centralizadas con respecto de decisiones, dirigiéndose particularmente a la aprobación del proyecto por la Intendenta y seremis de la región de Aysén. “La aprobación o rechazo de un proyecto de esta naturaleza, y de cualquier proyecto de impacto ambiental, en cualquier otra situación sana, civlizada, debe ser producto de un análisis de un panel de sólidos científicos y técnicos, que no tengan ninguna vinculación política ni con el gobierno ni con la empresa privada”.

Ahora, “con la aprobación del proyecto Hidroaysén se da una paradoja, porque por un lado fue bueno porque de otro modo no habría este movimiento, precisamente por eso, este movimiento se va a fortalecer tanto que Hidroaysén no se va a hacer. Yo me siento bastante convencido de que eso es lo que va a terminar ocurriendo”.

Consultado sobre un posible plebiscito por el tema Hidroaysén, que se ha planteado como una de las soluciones viables, mediante el cual los chilenos podríamos decidir sobre nuestro medioambiente, el Dr. Max Neef señaló que “se ha luchado mucho y ha habido campañas, se han hecho plebiscitos, pero no tienen validez política. No está permitido por la Constitución, lo cual es una aberración, porque en otros países si juntas una determinada cantidad de firmas, tienes derecho a hacer un plebiscito y eso debe ser respetado”. Dijo que existe una campaña para la modificación de la Constitución Política, que la dirige el Dr. Condezaen Concepción, sin embargo ha sido infructuoso, porque “al Gobierno no le interesa que eso ocurra, pero sería fundamental, porque obviamente, este debiera ser un proyecto que debiera ser sometido a plebiscito”.

También, el Dr. Max Neef fue consultado sobre su eventual postulación presidencial, a lo que contestó: “para mí ya la política se transformó en algo que ya no tiene ningún atractivo, no importa de qué lado sea, la política ha tenido un deterioro y una disgregación que encuentro patética. Creo que puedo ser mucho más útil haciendo lo que estoy tratando de hacer ahora que como presidente de la República”.

Finalmente, dijo que no ha recibido ninguna respuesta aún, a la carta que dirigió al presidente Sebastián Piñera, tras la aprobación de la construcción de represas en Patagonia.

Por Ivonne Coñuecar

Periodista Fc. Filosofía y Humanidades Uach